Matadero Madrid, promovido por el Ayuntamiento de Madrid, emplazado en uno de los enclaves más significativos de la arquitectura industrial madrileña de comienzos del siglo XX, se proyecta como un centro para la creación contemporánea las artes escénicas, las artes visuales, el diseño, la música, la danza, la arquitectura, el urbanismo, el paisajismo, la moda, la literatura, el pensamiento y el cine.
Matadero Madrid es un espacio vivo al servicio de los procesos creativos, de la formación artística participativa y del diálogo entre las artes: el objetivo fundamental es favorecer el encuentro y el diálogo de los creadores entre sí, y de éstos con el público. Es un espacio abierto para crear, reflexionar, aprender y disfrutar.
Cuenta con diferentes naves: la Casa del Lector, que hace del libro y de los lectores sus protagonistas; la Central de Diseño, un espacio donde se genera todo tipo de proyectos relacionados con el diseño gráfico; una Cineteca, que cuenta además con una cantina; el espacio de creación Intermediæ; el espacio expositivo Nave 16; la Nave de Música, con estudio de grabación, salas de ensayo y dos escenarios para conciertos; las Naves del Español, con dos salas y el Café Teatro.
Actualmente Matadero Madrid ofrece tres espacios propios donde tomar algo:
– El bar del Café Teatro constituye además un espacio para presentaciones y actividades teatrales y musicales. Es accesible y cuenta con una cabina de aseo adaptado.
– La Cantina, situada en Cineteca Madrid, donde es posible disfrutar de una cocina casera con un toque gourmet se encontraba la zona de calderas del antiguo matadero. Se accede a través de una escalera, con una plataforma elevadora alternativa, que no es posible activar autónomamente, se necesita la intervención y presencia del personal del establecimiento.
– La Terraza Matadero, el espacio interior abierto de Matadero Madrid. Cada verano la terraza está acompañada por alguna actividad o instalación artística, música y todos los protagonistas de la temporada.
Accesibilidad:
Casi todos los espacios son accesibles o practicables, las pendientes de las rampas de acceso a algunas de las naves constituyen quizás una de las principales dificultades.
La rampa de acceso por la entrada de Paseo de la Chopera, por ejemplo, tiene una pendiente excesiva. La entrada no tiene puerta, sino una cortina de plástico que dificulta el acceso.
Los espacios al aire libre son muy amplios y no presentan obstáculos.
Las taquillas y los mostradores de información no disponen de una zona adaptada para usuarios de silla de ruedas.