El Arte de Picar es un bar-museo taurino, cenáculo de aficionados y picadores. Ubicado en el centro histórico de El Puerto de Santa María, muy cerca de la Real Plaza de Toros.
Su propietario Francisco Atalaya, pertenece a la generación de los Pacurri, gente del toro, del caballo y cocheros del S. XIX. Su trayectoria como picador fue desde 1981 hasta 2003. Actualmente regenta este genuino bar, donde se ensalza la suerte de varas. Su decoración es espectacular, sus paredes están llenas de imágenes y artilugios vinculado al mundo del picador, todos ellos usados en la plaza, incluido su traje de picador.
Su cocina está basada en tapas caseras típicas portuenses, frías y calientes, usando para ello siempre productos de la zona y de temporada. Algunas tapas más tradicionales y otras más exclusivas como lo son “La Garrocha”, “El Castoreño”, “El Monosabio” o el “Pullazo”. Aunque su especialidad por excelencia es la carne al toro, el pollo al Pedro Ximenez, y en verano los chicharrones de atún.
En este auténtico rincón taurino han apostado por los vinos del marco de Jerez, en concreto por los de la Bodega Grant, una de las mejores bodegas de El Puerto.
Su doctrina es “El arte de varas, el arte de la gastronomía en El Arte de Picar”.
Accesibilidad:
Muy cerca a este establecimiento se encuentra la plaza de toros, rodeada de aparcamientos y con bastantes plazas reservadas para P.M.R.
Este establecimiento no es muy amplio, pero su deambulación es excelente, su pintoresco baño es accesible.